El celu

Y hablando de detestables, el celu es uno, cuando suena constantemente… y en algún caso cuando no suena…

Pero resulta que cuando se tiene chicos es inevitable. Porque “Ma, estoy en lo de papi” o “Ma, hoy tengo un cumpleaños de 15…” son cosas que yo necesito saber. Y paso por la vida creyéndomelo, que los niños son la razón de portar un enano tan maldito en la cartera.

Ja! A pesar de mi total convicción en lo contrario y en contra toda mi estructura ideológica, como tantas tecnologías, me está generando llamémosle una “necesidad”, ya casi una dependencia, la idea de que sin el no se puede ya vivir… El jueves lo perdí, el viernes no pude con el mundo! Desde el primer momento no pude coordinar mi medio de transporte, ni encontrarme a tiempo con la gente del trabajo, ni cerrar temas de reunión, ni comunicarme con nadie… Y era realmente necesario!

Es decir, de pronto me di cuenta que desde que uso celular, la programación de mi día está apenas esbozada, y cada uno de los temas cierra con una llamada de celular o un mensaje. Tengo una tendencia natural a la flexibilidad diaria, y el celular se me hizo un "odiado imprescindible"…

Ya no puedo sacrificar el costo del sistema de alarmas, del cable, de internet, y evidentemente tampoco del celular …