miércoles, 10 de junio de 2009

Resignación

La resignación no es uno de mis poderes.
Probablemente no lo haya necesitado tanto tampoco.
Voy por la vida activamente tranquila, segura de llegar siempre a los lugares a donde quiero llegar, aunque tarde siglos. Diría que me gusta que tarde un poco.
Y el esfuerzo es mi aliado también. Siempre está conmigo. Confío ciegamente en él.
Esto es porque siempre supe a dónde quería llegar, y tenía la confianza para hacerlo.
Bueno, las cosas cambian, y nada es más cierto que eso.
Lo único que no cambia es lo primero, la resignación no es uno de mis poderes.